El Ciclo Básico Común (CBC) de la Universidad de Buenos Aires (UBA) está de festejo: cumple cuatro décadas de democratizar el acceso al conocimiento, formar ciudadanos críticos y sostener la bandera de la educación pública como un derecho y no como un privilegio.
Nacido el 25 de marzo de 1985 en plena recuperación democrática el CBC fue desde el principio un proyecto revolucionario. No solo buscó nivelar saberes, sino que se propuso romper con el elitismo universitario: “Sin exámenes eliminatorios, sin cupos, sin filtros”, como un puente real hacia las carreras de la UBA. El CBC fue pensado como un espacio de formación integral: todas las carreras deben cursar las materias obligatorias de Introducción al pensamiento científico e Introducción al conocimiento de la sociedad y el estado brindando herramientas que no solo forman estudiantes sino principalmente ciudadanos y ciudadanas con una mirada crítica.
El ingreso irrestricto y la ampliación de las sedes fue un hito en la educación universitaria. Hubo un tiempo en que entrar a la universidad era una carrera de obstáculos: exámenes eliminatorios, cupos por carrera, restricciones económicas. El CBC cambió todo eso. Garantizó que cualquier persona, sin importar su escuela secundaria o su situación social, pueda comenzar una carrera.
Además, lo que comenzó en apenas cuatro sedes hoy se expande por 29 puntos en CABA y el Conurbano. Desde San Isidro hasta La Matanza, el Estado llega con aulas públicas y gratuitas.
El 3 de abril inicia el ciclo lectivo con aproximadamente 50000 inscriptos. Para muchos, será su primer contacto con la vida universitaria. Para el CBC, 40 años de insistir en que la educación es la mejor inversión de un país. El CBC no es un filtro, es un derecho. Y en tiempos de ajuste, defenderlo sigue siendo un acto de resistencia.
